El Teatro Familiar de Barrio fue una compañía de actores aficionados que entre 1981 y 1991 trabajó con la premisa de llevar el teatro a la gente, actuando en casas, barrios, parroquias, centros culturales, sedes sociales y cualquier lugar propicio para compartir su arte con el público. El grupo fue creado por el actor y director Rubén Sotoconil, quien con una profunda fe en sus convicciones y en la de sus camaradas transformó este espacio en una trinchera de libertad creativa en pleno periodo de dictadura, interpretando obras de Georges Courteline, Bertolt Brecht y Héctor Aguilar, entre otros. A tres décadas de la creación de este proyecto, son sus propios miembros fundadores los que narran esta experiencia de expresión y lucha que los marcó para siempre.