María Eugenia Pino Reyes es hija de padre y madre campesinos que emigraron a Santiago. Desde muy pequeña trabajó con ellos en la feria, con sus dos hermanos y su hermana. Sus espacios desde niña fueron las calles de Población San Gregorio. Estudió en el Liceo San Francisco de La Granja, actualmente comuna San Ramón. Luego de pasar por las carreras de Pedagogía en la Universidad de Valparaíso y Notificación en Derecho en la Universidad Católica de Valparaíso, se cambia a Pedagogía en el Instituto Pedagógico en 1978. Entró en contacto con las organizaciones de estudiantes y también formó parte de la Agrupación Cultural Universitaria, en paralelo a su participación en organizaciones en su población. Se tituló de Pedagogía en Castellano en 1980. Se dedicó a la docencia y además estudió Orientación Familiar. En 1983, crea la fundación Chile Derecho centrada en la reinserción escolar. Actualmente es presidenta de la INFA (Asociación de las Instituciones de Infancia).
Ellos no se conocen, pero un archivo fílmico del 11 de septiembre de 1973 los reunirá después de 50 años.
Chas Gerretsen, fotógrafo Holandés, quien registró con su lente el golpe de Estado en Chile, nos visita nuevamente después de 10 años y nos entrega su relato sobre el 11 y el 18 de septiembre de 1973.
Chas se reecontrará con su imagen en movimiento en un archivo audiovisual inédito, y que él desconocía completamente.
Leo de la Barra, cineasta chileno, filmó el Palacio de La Moneda en llamas con tan solo 20 años. Fue preso y torturado. Vivió su exilio en Bélgica. Y después de 50 años vuelve a Chile a donar la cámara de cine ECLAIR 16 mm. al Museo de la Memoria y los Derechos Humanos y también el material fílmico digitalizado del 11 de septiembre de 1973.
Ambos nos invitan a un viaje hacia el pasado, memoria, reencuentros, anécdotas y emociones.
Y como hilo conductor, el libro de fotografías llamado “Chile. El archivo fotográfico 1973.1974” de Chas Gerretsen.
Quien fuera por 35 años miembro activo de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos, integrante del taller de arpilleras y una de las fundadoras del conjunto folklórico de la agrupación, nos cuenta en este relato su vivencia estudiando en la Unión Soviética por cinco años y su vuelta a Chile en 1972. Además, narra cómo debe enfrentar el triste día 11 de septiembre de 1973, que condujo a la posterior detención y desaparición de su padre Víctor Díaz López, quien fue Dirigente Nacional de la CUT y Subsecretario General del Partido Comunista de Chile.
El 29 de junio del 2023, se conmemoran 50 años del Tanquetazo y la muerte del camarógrafo argentino Leonardo Henrichsen. Un hito que marcó a muchas personas, en especial al cineasta Pepe De la Vega, quien ese día 29 estuvo en las calles de Santiago registrando el sonido directo de lo que estaba aconteciendo.
Los nietos de don Andrés Aylwin Azócar, Carolina Aylwin y Matias Rivas , presentan la donación del archivo personal del abogado y defensor derechos humanos que dedicó su vida a la protección de los perseguidos y a sus familias, a quienes representó y acompañó siempre en su incansable demanda de verdad y justicia para las víctimas de la dictadura civil militar en Chile.
Diputado electo en 1965, 1969, 1973 y después de la dictadura entre 1989 y 1998.
Fue uno de los trece democratacristianos que condenaron de inmediato el Golpe de Estado contra el presidente Salvador Allende. Durante los diecisiete años de dictadura se abocó en cuerpo y alma a la defensa de los derechos humanos y a combatir los atropellos, que sentía como propios. Formó parte del Comité para la Paz y luego de la Vicaría de la Solidaridad. Estuvo al borde de la muerte cuando en 1978 la dictadura lo relegó en Guallatire, en la provincia de Putre, región de Arica y Parinacota en el norte de Chile.
Fue parte del primer directorio de la Fundación Museo de la Memoria y los Derechos Humanos al momento de su inauguración en el año 2010.
El archivo de don Andrés Aylwin está constituido por correspondencia , textos, prensa, documentos legales, entre otros, testimonios fiel de las diversas acciones que realizó y que permitieron salvar vidas. Hoy ellos nos permiten construir memoria.
Compartimos un fragmento de la entrevista realizada a sus nietos.
La AGECH se organizó en todas las regiones agrupando a los trabajadores de la educación que buscaban mejoras laborales. En este contexto la Asociación Gremial de Educadores de Chile se convirtió en un espacio de organización crítica a las políticas de la dictadura, apoyando y abriendo sus puertas a los distintos movimientos de resistencia.