Víctor Vargas Espinoza, nació en Santiago. Comienza a trabajar a muy temprana edad. Ingresa al Partido Comunista e inicia su labor sindical como trabajador de Maestranza Jemo y como dirigente a la Federación del Metal. Durante la dictadura participa de la reconformación de las organizaciones sociales y políticas desde los clubes deportivos en el sector de El Pinar (hoy San Joaquín). Después de pasar un tiempo en Argentina, retoma su actividad sindical ingresando como dirigente nacional de la Constramet. Hoy está retirado de la actividad, pero participa de actividades que contribuyan a la construcción de la memoria histórica.
Rodolfo Seguel Molina, dirigente sindical, político y militante de la Democracia Cristiana nacido en Rancagua. Entra trabajar a la mina «El Teniente» de Codelco en 1974, donde se inicia como dirigente sindical. Posteriormente se integra al Sindicato Profesional de Caletones y más tarde asume como Presidente de la Confederación de Trabajadores del Cobre, desde donde tuvo un rol fundamental en la reactivación del movimiento social de los trabajadores en dictadura. Fue nombrado Presidente del Comando Nacional de Trabajadores del Cobre, desempeñándose hasta 1987. Con el fin de la dictadura, fue electo diputado por el Distrito 28 de la Región Metropolitana (Lo Espejo, Pedro Aguirre Cerda y San Miguel) por cuatro periodos entre 1989 y 2005. Actualmente es Consejero Regional (CORE) de la Región Metropolitana.
Claudina García, nacida en el seno de una familia minera de Tocopilla, desde muy niña estuvo conectada con la lucha social. Contrae matrimonio muy joven con Héctor Cuevas Salvador, dirigente de la construcción. Ambos militantes del Partido Comunista, les toca afrontar la represión de la dictadura, pues su marido sufrió la prisión política, tortura, relegación y expulsión del país. Ella se queda en Chile junto a sus hijos, para seguir en contacto con las organizaciones sociales y denunciar los atropellos de la dictadura, apoyando desde dentro la pelea por el derecho de vivir en la patria de su esposo. Claudina ha continuado el legado de “El Loco” Cuevas (quien falleció al poco tiempo de que se le permitiera regresar en 1985) en diferentes organizaciones sociales y es directiva del Centro Cultural que lleva el nombre de su marido, en la histórica sede de Serrano 444, en Santiago.
Diego Olivares, ligado al movimiento de jóvenes cristianos, participa en los comités de derechos humanos de la zona sur de Santiago. Comienza su labor política como militante del Partido Demócrata Cristiano. Durante la dictadura asume un rol relevante como presidente del la Confederación Bancaria y como presidente de la reconformada Central Unitaria de Trabajadores, en 1988, en ausencia de Manuel Bustos, que había sido tomado preso por la dictadura. En 2003 decide abandonar la CUT para conformar la Unión Nacional de Trabajadores de la cual es su Consejero Nacional.
Moisés Labraña Mena, inicia sus trabajos en la minería en la ciudad de Andacollo, en las auríferas de la IV Región. De militancia comunista, asume como dirigente nacional de la Confederación Minera de Chile en pleno periodo de la dictadura. Como otros dirigentes sindicales, fue reprimido por la dictadura, sufriendo prisión y relegación. Aun continua la labor de dirigencia en su Confederación.
Carlos Opazo Bascuñán, oriundo de San Javier de Loncomilla en la Región del Maule. Ingresa al movimiento sindical campesino en 1960, como encargado juvenil en el Sindicato La Victoria de Peñuelas. En dictadura asume el cargo secretario general de la Confederación Ranquil, cuando el movimiento campesino había sido duramente reprimido por la contra-reforma agraria. Al igual como ocurrió con varios dirigentes sindicales, sufrió prisión política, secuestro y relegación. Hoy continúa sus labores en temas campesinos, especialmente abocado al rescate y preservación de las semillas que corren riesgo de desaparecer por industrialización de productos transgénicos.