Milton Juica Arancibia es ex abogado y exministro de la Corte Suprema de Justicia. Nació el 26 de junio de 1943 en La Serena. Sus estudios escolares los realizó en el Liceo Gregorio Cordovez de La Serena y posteriormente estudió derecho en la Universidad de Chile, jurando como abogado en 1972. Durante su trayectoria en el Poder Judicial fue juez de letras de Andacollo, Juez del Primer Juzgado de Letras de Copiapó, relator de la Corte de Apelaciones de Punta Arenas, relator de la Corte Suprema y ministro de la Corte de Apelaciones de Santiago. En ese cargo fue nombrado ministro en visita en dos causas de derechos humanos: el “Caso Degollados” y “Operación Albania”. En 2001 asumió como ministro de la Corte Suprema tras haber sido nominado por el presidente de la república, Ricardo Lagos Escobar, llegando a presidir dicho organismo en el 2009. El 22 de junio de 2018, a días de cumplir 75 años, se retiró del Poder Judicial. Hoy sigue dedicado a la docencia en la Escuela de Derecho de la Universidad Nacional Andrés Bello.
Carlos Cerda Fernández es ex ministro de la Corte Suprema de Justicia. Nació en Santiago el 22 de junio de 1943. Es abogado de la Universidad Católica con estudios doctorales en derecho en la Universidad de Lovaina y en la Universidad de París II. Asumió como relator de la Corte Suprema en 1979 y en diciembre de 1982 fue designado ministro de la Corte de Apelaciones de Santiago, cargo desde donde comienza a investigar casos de violaciones de derechos humanos ocurridas en la dictadura. Allí, además, se hace cargo del “Caso de los 13”, que trata la desaparición de militantes del Partido Comunista y el Movimiento de Izquierda Revolucionaria, dictando luego un procesamiento de 40 personas que integraban el llamado «Comando Conjunto». En pleno contexto de dictadura, esto le significó enfrentarse con la aplicación de la Ley de Amnistía y las presiones del régimen al poder judicial, siendo amonestado y quedando al borde de la expulsión. Ya en contexto de democracia, investigó el “Caso Riggs”, por malversación de fondos públicos hechos por Augusto Pinochet y otras personas cercanas a éste. En 2014, asumió como ministro de la Corte Suprema. Se retiró del Poder Judicial en 2018, al cumplir los 75 años.
Laura Elgueta Díaz es periodista y comunicadora social. Su hermano, Luis Enrique Elgueta Díaz fue detenido en Buenos aires el 27 de julio de 1976. Luis, además, iba acompañado de su pareja, Clara Haydee Fernández y la hermana de esta, Cecilia Fernandez. Desde esa fecha los tres permanecen desaparecidos. Un año después, Laura fue detenida en la misma ciudad junto a su cuñada Sonia Díaz Ureta. Luego de su liberación, se exilio junto con su familia en México. En ese país, realiza una serie de denuncias ante organismos de derechos humanos. Posteriormente, y ya recuperada la democracia tanto en Argentina como en Chile, participó como testigo en la investigación por el Caso Prats. A raíz de este proceso, la justicia de Argentina abrió un nuevo juicio por su secuestro junto con su cuñada, mientras que en paralelo se investigaba el caso de su hermano como parte de los crímenes de la operación Cóndor. En marzo de 2014, Laura declaró en el Tribunal Oral en lo Criminal N°1 de Buenos Aires en el juicio contra ex militares argentinos vinculados con este plan y que fueron sentenciados en mayo de 2016.
Tamara Montiglio Belderessi es administradora pública, antropóloga y archivera. Es hija de Juan José Montiglio Murua, militante del Partido Socialista y encargado de seguridad del presidente Salvador Allende. El 11 de septiembre de 1973, Juan José fue detenido por efectivos militares en el Palacio de la Moneda, junto a un grupo de personas asesores de la presidencia y miembros del GAP. Fueron llevados al Regimiento Tacna, donde permanecieron hasta el día 13, y posteriormente fue trasladado al recinto militar de Peldehue donde fueron asesinados. Juan Jose, permaneció en calidad de detenido desaparecido hasta que sus restos fueron encontrados e identificados en el año 2017. En paralelo, su caso era investigado por la justicia italiana como parte de los Juicios de la Operación Cóndor.
Margarita Maino Canales es educadora y hermana de Juan Bosco Maino Canales, ingeniero egresado de la UTE y fotógrafo, militante del MAPU, detenido por agentes de la DINA el 26 de mayo de 1976, fecha desde la que se encuentra desaparecido. En el presente testimonio, Margarita relata las primeras gestiones que comenzó a realizar su madre, Filma Canales, para encontrar a su hijo, cuestión que la llevó a formar parte de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos. Desde entonces, comenzaron como familia una dificultosa tarea de encontrar verdad y justicia, cuestión que las llevó a ser parte de los juicios en Roma por la investigación de la Operación Cóndor.
Nora Benavente es una mujer de origen humilde que, al momento del golpe de Estado, vivía junto a sus cuatro hijos. Su hija Patricia fue detenida y durante varios meses no se supo de su paradero. Esto marcó el inicio de una larga travesía en su búsqueda que culminó cuando la encontró en el recinto de detención de Tres Álamos. Si bien esto significó un momento de alivio para Nora y su familia, también fue de incertidumbre, pues implicaba el inicio de un nuevo proceso.
Meses después, Patricia fue expulsada de Chile y partió rumbo a Suecia, un destino que ofrecía seguridad, pero también aislamiento y separación familiar.
Es así como Nora, junto a otras compañeras que compartían experiencias similares, fundan, en 1978, el Comité Pro Retorno, grupo que se dedicó a abogar por el regreso de sus seres queridos y de todas las personas exiliadas por el régimen de Pinochet, enfrentando numerosos obstáculos y riesgos.
El trabajo del Comité Pro Retorno no solo fue un acto de resistencia política, sino también un esfuerzo personal y emotivo para la reconstrucción de vidas, rotas por la dictadura. Este esfuerzo tuvo un alto costo. La dedicación de Nora y sus compañeras atrajo la atención y las represalias del régimen, resultando en relegaciones de sus integrantes o secuestros de familiares, como el caso de otro hijo de Nora, Alejandro, quien estuvo cinco días en manos de la CNI. Estos acontecimientos subrayaron el sacrificio y el coraje de Nora en su lucha por la justicia y la reunificación familiar.
Alejandro y Cristian Fuentes Benavente, hijos de Nora, nos presentan el archivo personal de esta incansable luchadora social.