TESTIMONIO DE MARCEL GARCÉS, periodista, ex militante del Partido Comunista. Trabajó en diario El Siglo, Radio Nuevo Mundo y Radio Magallanes. Luego del Golpe realiza labor clandestina para el partido hasta que en 1980 surge la posibilidad de partir a la Unión Soviética (Rusia, URSS) para ser redactor y comentarista de “Escucha Chile!” de Radio Moscú, puesto que ocupa hasta que el programa sale del aire el mismo año que termina la dictadura. El retorno junto a su familia en 1996 fue un proceso complejo, marcado por desadaptaciones familiares y decepciones por los procesos políticos y sociales que comenzó a experimentar el país. Marcel continúa su labor periodística en la oficina chilena de Agencia Notimex de México.
TESTIMONIO DE CARLOTA GARCÍA GATICA, profesora de educación básica con estudios en orientación familiar, ex militante del MAPU y actual militante del Partido Comunista. Al momento del Golpe trabajaba en INDAP, de donde fue exonerada. Vivió el exilio junto a su familia en Alemania Oriental (RDA). Retornó a Chile en 1987, trayendo consigo la carga de la disgregación familiar, situación que igualmente pudo trabajar en el área pedagógica de la Fundación PIDEE, como orientadora de niñas y niños retornados. Hoy administra un negocio familiar de comida.
TESTIMONIO DE PATRICIO HEVIA RIVAS, médico pediatra y ex militante del MAPU. Trabajó en el Gobierno de la Unidad Popular en los “Programas de Fomento” del Ministerio de Salud. Después del Golpe de Estado tuvo que refugiarse en la Residencia del Embajador de México, donde estuvo casi seis meses antes de partir al exilio a ese mismo país. En su relato se refiere a estos elementos de su vida, además de su proceso de retorno, su reincorporación a la sociedad chilena y los trabajos de memoria a los que está dedicado en la actualidad como miembro del Colegio Médico.
Alfonso Lathrop Tejos, comienza su labor social en el Frente Estudiantes Revolucionarios y posteriormente en el Frente de Trabajadores Revolucionarios y el Partido Socialista. Trabajó en Ferrocarriles del Estado hasta 1977, año en que tiene que exiliarse. A su retorno en 1982, se inicia en el mundo sindical desde la Federación Nacional de Sindicatos Bencineros, rubro con una fuerte intervención de los gremios y los sectores pinochetistas. Encabezando un proceso de cambio, logró vincularse con la Coordinadora Nacional Sindical y posteriormente con la reconformada Central Unitaria de Trabajadores. En 2003 abandona la CUT para conformar la Unión Nacional de Trabajadores.
María Cristina Flores, vivía junto a su marido Manuel Antonio Maldonado (testimonio disponible en la presente colección) en el Asentamiento Santa Inés de Lampa, al momento del Golpe de Estado. Posterior a ese episodio detienen a su marido, a su suegro, Manuel Maldonado Miranda, y a un cuñado, Víctor Maldonado Gatica, por lo que se organiza con otras mujeres para la búsqueda de sus familiares. Su marido logra escapar a dos fusilamientos –pero tanto el padre como el hermano fueron ejecutados- y juntos logran asilarse en la embajada de Bélgica partiendo posteriormente al exilio.
El relato de María Cristina da cuenta de los grandes desafíos que le tocó vivir durante el proyecto de la Reforma Agraria y de cómo junto a su familia logró sobreponerse para salir adelante después de vivir la tragedia del Golpe, el asesinato de seres queridos, el exilio y el retorno.
Manuel Antonio Maldonado Gatica durante la Unidad Popular y hasta momento del Golpe de Estado fue trabajador agrícola del Asentamiento Santa Inés de Lampa y militante del Movimiento de Izquierda Revolucionaria. Después del 11 de septiembre de 1973 fue detenido y llevado a la Escuela de Paracaidistas y Fuerzas Especiales de Peldehue y al Estadio Nacional. Logró escapar de dos fusilamientos y posteriormente pudo asilarse en la Embajada de Bélgica junto a su esposa, María Cristina Flores (quien también forma parte de la presente colección de testimonios). Su padre, Manuel Maldonado Miranda, y uno de sus hermanos, Víctor Maldonado Gatica, quienes también habían sido detenidos, fueron ejecutados.
El presente registro da cuenta de dichas vivencias, además de indagar en el proceso trunco de la Reforma Agraria, la vida en exilio, el retorno y la visión del Chile de nuestros días.
Manuel Antonio Maldonado Gatica durante la Unidad Popular y hasta momento del Golpe de Estado fue trabajador agrícola del Asentamiento Santa Inés de Lampa y militante del Movimiento de Izquierda Revolucionaria. Después del 11 de septiembre de 1973 fue detenido y llevado a la Escuela de Paracaidistas y Fuerzas Especiales de Peldehue y al Estadio Nacional. Logró escapar de dos fusilamientos y posteriormente pudo asilarse en la Embajada de Bélgica junto a su esposa, María Cristina Flores (quien también forma parte de la presente colección de testimonios). Su padre, Manuel Maldonado Miranda, y uno de sus hermanos, Víctor Maldonado Gatica, quienes también habían sido detenidos, fueron ejecutados.
El presente registro da cuenta de dichas vivencias, además de indagar en el proceso trunco de la Reforma Agraria, la vida en exilio, el retorno y la visión del Chile de nuestros días.