Iquiqueño, ingresó a la política a los 15 años, y llegó a militar en el Partido Radical. Estudió en una escuela industrial y después en la Escuela Normal. Relata como vivió el golpe de Estado y los días posteriores, hasta ser detenido por Carabineros y llevado a Pisagua. Relata los interrogatorios y el maltrato físico y sicológico al que fue sometido. Recuerda la visita de la Cruz Roja Internacional a Pisagua. Al salir de ese centro de detención, fue relegado a Pozo Almonte durante más de tres años, debiendo firmar diariamente en la Comisaría. Luego formó familia y se quedó en Pozo Almonte, trabajando en el liceo, hasta 1987, cuando fue exonerado. Volvió a Iquique, pero estuvo varios años sin encontrar un trabajo fijo, hasta el retorno de la democracia.
El padre Luis Riquelme vivía en Rancagua al momento del golpe de Estado, posteriormente fue párroco en San Fernando. Desde un primer momento, junto a otros sacerdotes, decidieron dedicarse a prestar ayuda a los perseguidos políticos y a sus familiares. Realizaban visitas a las cárceles, reunían alimento y asistían a quienes necesitaban salir al exilio, entre otras actividades orientadas a sobrellevar las violaciones de los derechos humanos propias de la época.
El 14 de junio 2013, el fotógrafo holandés Chas Gerretsen visitó el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos. Testigo directo del bombardeo de La Moneda el 11 de septiembre de 1973, registró con su cámara el momento de la salida de los colaboradores del Presidente Salvador Allende que se encontraban al interior del palacio de gobierno, y como eran tirados boca abajo por los militares. El presente video incorpora el testimonio de estos hechos, en el que describe una secuencia de imágenes en color de ese momento que el foto-reportero donó al Museo y que están exhibidas como gigantografías en los muros de la sala Golpe de Estado.
Chas Gerretsen nació en la ciudad de Groningen, el 22 de junio de 1943. Desde fines de los años 60 comenzó a trabajar como corresponsal de guerra, cubriendo conflictos armados en Vietnam, Camboya y varios países de Latinoamérica. Llegó a Santiago el 8 de junio de 1973 como corresponsal de la Agencia Gamma y prestando servicios para la revista Time. En nuestro país cubrió los últimos meses de la Unidad Popular y el primer periodo de la dictadura –suya es la imagen más icónica que existe del dictador Augusto Pinochet con gafas oscuras. Durante la segunda mitad de los 70 trabajó como fotógrafo en Hollywood, siendo invitado por Francis Ford Coppola para realizar foto fija en el rodaje de Apocalypse Now, debido a sus experiencias en tiempos de guerra, cuestión narrada en el documental Dutch Angle: Chas Gerretsen & Apocalypse Now (2019), de Bariz Asman.
Gerretsen se retiró de la fotografía en 1989, pero sigue compartiendo las miles de imágenes que registró, por más de dos décadas, a través de redes sociales.
En febrero de 2013, Exequiel Díaz Carroza llegó hasta el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos para entregar una valiosa donación. Siendo un joven Cabo 1º del Ejército, cumpliendo funciones en el Regimiento Nº19 Colchagua de San Fernando, comenzó a registrar una bitácora personal. Eran los días posteriores al golpe de estado y en un cuaderno fue anotando todos los ingresos y las salidas de los prisioneros políticos que llegaban hasta ese recinto militar. Los gestos humanitarios que tuvo con los prisioneros durante los primeros meses de la dictadura, le costaron al señor Díaz la expulsión del Ejército y posterior persecución por los servicios represivos. Sin embargo, sus acciones sirvieron, tres décadas después, para confirmar varios casos ante la Comisión Nacional de Prisión Política y Tortura.
Ninón Neira, Noel Neira, Joaquín Real
Después del golpe de Estado, familiares de detenidos, profesionales y jóvenes, buscaron la manera de organizar la ayuda para quienes estaban siendo víctimas de la represión. En un contexto de amedrentamientos y persecuciones, poco a poco lograron realizar acciones concretas, defendiendo a algunos detenidos, acogiendo a los relegados, apoyando a quienes eran despedidos de sus trabajos y buscando espacios para la reorganización social y política. La Agrupación funcionó informalmente hasta 1985, año en que se constituye como Comisión Chilena de Derechos Humanos, capítulo Coyhaique, logrando una coordinación a nivel nacional. Tras el fin de la dictadura esta organización se mantiene activa y actualmente se conoce como Agrupación de Derechos Humanos de Coyhaique, dedicándose a la búsqueda de justicia y mantener viva la memoria.
Oriunda de Copiapó, Jimena fue militante socialista y estuvo casada con Carlos Quiroga Rojas, también socialista y militante del MIR. Quiroga fuetrasladado, previo al golpe de Estado, a la ciudad de Antofagasta por motivos laborales, y fue detenido por carabineros el día 12 de septiembre de 1973, siendo ejecutado el 20 del mismo mes. A partir de estos hechos ella junto a familiares de víctimas de la Caravana de la Muerte en Copiapó, organizó la ayuda que entregaba la iglesia y cooperó con la búsqueda de verdad y justicia de manera incansable hasta el día de hoy.